miércoles, 5 de noviembre de 2014

CUESTIONARIO 6

1)      Diferencias entre hepatitis A y C:

La diferencias son en la transmisión la hepatitis A es por vía fecal-oral mientras que en la hepatitis C es por vía parenteral, el periodo de incubación de la hepatitis A es de 2-6 semanas a diferencia de la hepatitis C que es de 2 semanas a 2 meses, también se observan diferencias en los grupos de riesgo de cada una de ellas pues en la hepatitis A son niños y personas que viajan a lugares con higiene insuficiente mientras que en la C son aquellas personas adictas a las drogas de administración por vía parenteral, profesionales de la salud o personas expuestas a sangre. Por último la hepatitis C es una enfermedad crónica a diferencia de la hepatitis A que es aguda.

2)      Establece la cronología de la aparición de síntomas hepáticos en la cirrosis:

En los comienzos de la cirrosis, el hígado tiende a ser grande y sus hepatocitos están llenos de grasa. La glándula tiene consistencia firme y a la palpación se advierte el borde nítido con facilidad. Puede haber dolor abdominal por la hepatomegalia rápida y reciente. Luego, el hígado disminuye de volumen conforme se contraen el tejido cicatricial y el parénquima. El borde si es palpable, es de tipo nodular.
Las manifestaciones tardías se deben a la insuficiencia crónica de la función hepática y la obstrucción de la circulación porta. No hay paso libre  de la sangre porta (hipertensión portal) que es devuelta al bazo y tubo digestivo provocando disfunción de dichos órganos además de varices esofágicas pues esta sangre tiene que pasar a fluir por vasos colaterales de menor presión. En tal situación, surgen disepsia crónica y cambios en los hábitos de defecación, con estreñimiento o diarrea junto a una disminución ponderal gradual. Puede acumularse líquido en la cavidad peritoneal y producir ascitis.

3)      ¿Cómo se trata la diverticulitis?

Se aconseja una dieta rica en fibra y evitar el sedentarismo, tratamiento con rifaximina, antibioterapia  y el uso de probióticos. Si se tratase de una diverticulitis complicada puede llegar a ser necesaria la intervención quirúrgica.

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